El consumo indiscriminado de bebidas energizantes aporta un alto contenido en azúcar y calorías innecesarias al cuerpo por lo que resultan perjudiciales para la salud en aquellas personas que no hacen ejercicio.
Maximiliano Hernández López, nutriólogo del Hospital General Regional (HGR) número 20 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tijuana, recomendó evitar la mezcla de estos productos con bebidas alcohólicas, hábito que se ha convertido común entre los jóvenes, pese a que sus componentes alteran el sistema nervioso central provocando taquicardias, deshidratación e infartos.
El especialista destacó que la intoxicación por este tipo de mezclas se manifiesta con insomnio, angustia, agitación o una falsa sensación de euforia, debido a que al que los refrescos, se caracterizan por altos niveles de azúcar y calorías que son innecesarias para el organismo, lo que puede ser causante de sobrepeso y obesidad.
Recomendó que antes de consumir cualquier producto energizante se debe consultar la tabla nutricional para verificar su contenido y el valor de los carbohidratos, a fin de no incurrir en el abuso con una afectación a la salud.
Hernández López, enfatizó que no se deben confundir las bebidas energizantes con las bebidas deportivas, pues las primeras contienen estimulantes como taurina y cafeína – no aptas para niños-, mientras que las segundas contienen agua y electrolitos, son recomendables para después de realizar algún ejercicio o desgaste físico y evitan la deshidratación.
La nutrióloga manifestó que lo más recomendable es el consumo de agua natural, que es uno de los principales componentes del cuerpo humano, además de que ayuda a las funciones vitales es esencial para la transportación de nutrientes a las células, facilita la digestión y contribuye a la regulación de la temperatura corporal, entre otras funciones.
