Padecimiento común en el sexo femenino, la incontinencia urinaria es la pérdida involuntaria de orina que en ocasiones puede ser tan mínima que no hay necesidad de consultar al médico o intensa, al grado de requerir procedimiento quirúrgico.
El doctor Rodolfo Ruíz González de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 25 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Ensenada, detalló que este problema tiene repercusiones en la vida social del paciente, al grado de evitar las relaciones sociales por vergüenza.
Al respecto, destacó las causas más frecuentes como lesiones neurológicas y del esfínter uretral; enfermedades degenerativas, demencia, tratamientos de radioterapia e inflamaciones como cistitis.
Detalló la pérdida de orina involuntaria es lo más frecuente y ocurre al toser, estornudar, mantener relaciones sexuales o al realizar algún esfuerzo físico; en tanto que en algunos casos puede ir acompañado de dolor o infecciones.
Ruíz González, explicó que existen una serie de factores de riesgo que predisponer a padecer este problema; una histerectomía, partos vaginales, menopausia, obesidad, estreñimiento, diabetes o alzhéimer.
Puntualizó que para el tratamiento se requiere que el paciente tenga sus funciones cerebrales plenamente conservadas y que esté motivado. Los procedimientos son quirúrgicos si es de esfuerzo y en el caso que sea de urgencia, sólo se utilizan fármacos.
Para prevenirla o atrasar su aparición se pueden adoptar una serie de medidas como la práctica de ejercicios de Kegel, reducir el consumo de cafeína, alcohol y medicamentos diuréticos; combatir el estreñimiento, evitar la obesidad y limitar la ingesta de bebidas por la tarde.