La semana pasada, la iniciativa aterrizó en la Colonia Luis Donaldo Colosio, en el parque de fútbol, en la Colonia Alianza para la Producción y la Escuela Primaria Centenario de la Constitución de 1857. Cada sesión inició a las 5:30 p. m.
Mexicali.- La Comisión Estatal de Servicios Públicos de Mexicali (CESPM) ha convertido la cultura y el entretenimiento en una poderosa herramienta de concienciación con su programa Cine y Cultura en Movimiento. Esta iniciativa no es solo cine al aire libre, es una invitación a reflexionar sobre el recurso más vital de la región: el agua.
Bajo esta iniciativa, la CESPM lleva historias y enseñanzas a diversas colonias, integrando proyecciones con actividades educativas que subrayan la importancia del uso responsable del agua.

La estrategia forma parte del programa Cultura del Agua, alineado con la visión de sustentabilidad impulsada por la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, quien ha enfatizado la necesidad de preservar los recursos naturales para el bienestar de Baja California.
La semana pasada, la iniciativa aterrizó en la Colonia Luis Donaldo Colosio, en el parque de fútbol, en la Colonia Alianza para la Producción y la Escuela Primaria Centenario de la Constitución de 1857. Cada sesión inició a las 5:30 p. m., momento en el que niños y adultos se sumergen en una atmósfera de aprendizaje y convivencia.
Pero la magia de este proyecto no está solo en las películas. Antes y después de las proyecciones, las familias participan en actividades interactivas que muestran cómo pequeños hábitos pueden marcar la diferencia: cerrar la llave al cepillarse los dientes, reutilizar el agua en tareas domésticas o reportar fugas. La intención es clara: transformar el conocimiento en acción.
El impacto de Cine y Cultura en Movimiento va más allá del entretenimiento. Al reunir a la comunidad en torno a un propósito común, el programa fomenta el trabajo en equipo y refuerza el sentido de responsabilidad colectiva. De esta forma, CESPM reafirma su compromiso con el desarrollo sostenible de Mexicali, mostrando que, a través de la educación y la cultura, es posible inspirar cambios duraderos.